jueves, octubre 12, 2006

Pampanario en la Alpujarra

Por las quebradas encajonadas de la Alpujarra escalan las casas blancas de Pampanario. Por sus vericuetos luminosos murmuran sosegados algunos hippies de la montaña, artistas retirados, turistas perdidos y alpujarreños de quinta generación. Jarapas multicolores a la venta cuelgan de las fachadas. El aire es tan limpio y el sol tan puro que asombra. ¡Piérdete por sus cuestas, bajo sus balcones, sobre sus tejados! Las calles tienen nombres de poetas y sabios. La montaña se abre a la puesta del sol. ¡Asómate al barranco desde sus muretes, sus azoteas, sus fuentes!... Una corriente de agua antigua atraviesa cantarina el pueblo. Y se vierte dulce en el lavadero antiguo y encalado, reluciente. ¡Duermete a su sombra, escuchando sus rumores¡

Por las quebradas encajonadas de la Alpujarra...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Se nota que la conoce, precioso.